Cuando mi marido me abofeteó por no cocinar porque tenía 40 grados de fiebre, firmé los papeles del divorcio. Mi suegra gritó: “¿A quién crees que asustas? ¡Si te vas de esta casa, acabarás mendigando en la calle!”, pero le respondí con una sola frase que la dejó sin palabras…
Se dice que el matrimonio se basa en el amor y la paciencia. Pero ¿qué ocurre cuando solo una persona ama y la otra maltrata? […]